Dos cofradías dan el paso de crear su casa de hermandad en Albatera
Ambas se situarán en el recorrido histórico de la Semana Santa de Albatera
Tanto la Hermandad y Cofradía del Santo Sepulcro y Nuestro Padre Jesús Rescatado y la Hermandad Ntro. Padre Jesús de la Salud y Ntra. Sra. de la Esperanza han dado el paso de crear su propia casa de hermandad.
La primera de ambas fue la Cofradía del Santo Sepulcro, que ubica su casa de hermandad en la intersección de la calle Virgen de los Dolores y calle Gobernación, con una superficie de más de 300 metros cuadrados. La Hermandad de Ntra. Sra. de la Esperanza le ha seguido, el terreno de su futura casa de hermandad se ubica en la calle Niño Jesús.
Actualmente no hay ningún proyecto claro aún para esta última: “Son propietarios del solar y eso condiciona un poco los ritmos. En estos momentos se empieza a organizar el proyecto o el programa, vamos a comenzar a determinar aquellos espacios que son necesarios para la hermandad”, cuenta Mario Box, el arquitecto del proyecto.
Algo que tienen claro los “esperanzos” es que quieren varios espacios, uno de ellos para guardar los tronos e imágenes, que en la actualidad las tienen en la iglesia. “Necesitan diferentes espacios para dar respuesta a la variedad de actividades que caracteriza a esta hermandad, por ejemplo el curso de hilado en oro, el coro rociero…Además, antes de comenzar cualquier proyecto también es necesario la delimitación con la parcela colindante. Al final de este mes comenzaremos a elaborarlo”, declara Mario Box.
Siguiendo con la distribución de los espacios necesarios, también tienen claro que no los pueden desarrollar todos al mismo tiempo: “los que primero se van a desarrollar serán el de guardar los tronos e imágenes y otro para el ajoar, los otros se desarrollarán poco a poco”, continua el arquitecto.
El palio de la esperanza ronda los 6 metros de altura, esto condicionará mucho la construcción. Lo más seguro es que la puerta no esté enrasada a la cera, sino que haya un pequeño retranqueo, necesario por la maniobra de entrada y salida del trono.
Por otra parte, Pedro Serna, presidente de la Hermandad de la Salud y la Esperanza aclara que: “Para la compra del terreno de 220 metros cuadrados se ha contado con el apoyo de todos los cofrades, pues el proceso ha sido participativo y durante este año se han realizado tres asambleas extraordinarias. Además, todos ellos han participado a la hora de elaborar los espacios necesarios que debe tener su futura casa”.
Además, adelanta que en principio se ejecutará de la siguiente forma: “La casa tendrá tres plantas, la baja tiene una superficie de entrada de unos 60 metros cuadrados, que será donde se coloque a los tronos, en el interior de esa planta se encontraría la secretaría, la sala de reuniones de la Junta de Gobierno, la Diputación Mayor de Gobierno, la Priostía, un almacén, un área para guardar las cosas de caridad, un servicio y un patio pequeño en la parte de atrás”.
Sigue aclarando que “la segunda planta estaría retraída hacia atrás, pues en el espacio donde guardan los tronos necesita de más altura que el resto, aquí se ubicaría un gran salón de uno 90 metros cuadrados y una estancia para costura y bordado, otro para el grupo de actividades, otro para los costaleros, otro para el coro y una pequeña cocina. La última planta, que ya ocuparía los 215 metro cuadrados, habría un espacio grande para las asambleas generales, dos almacenes, uno para los cultos y otro servicio y la parte de atrás de unos 80 metros cuadrados de mayordomía, es donde más necesidad tenemos”.
“Otro dato importante que condiciona al incremento del presupuesto es que al ser una hermandad grande con tantas actividades, quizás en un momento determinado se juntan más de 100 personas, esto ya se caracteriza como un edificio público que necesita de recorridos de evacuación”, declara el arquitecto.
La colaboración y participación caracterizan a esta hermandad, por lo que también han propuesto colaborar en la construcción de ésta y así reducir costes, pero es algo que aún está en el aire por su complejidad.
El arquitecto también destaca la importancia de dar este paso: “pues este movimiento siempre se ha planteado. Cada cofradía tiene la necesidad de dar cobijo a su patrimonio. La Semana Santa de Albatera tiene su peso y hay muchas imágenes, ademas, éstas tienen unas necesidades de conservación”.
Actualmente, algunas hermandades tienen locales y ahí es donde guardan su patrimonio, suelen ser bajos de edificios o cualquier otro local sin la altura suficiente para guardar los tronos. El trono con la imagen suele tener una altura de 4,5 metros, pocos locales tienen esta capacidad. En el Viernes Santo se suele “desmontar” y guardar el trono por un lado y la imagen por otro. Cuanto menos se manipulen las imagines menos daños sufrirán.
También hay otras cofradías que necesitan del Patronato para resguardar sus imágenes, lo hacen en una nave en el que deben guardar a ocho o nueve cofradías, “son demasiadas imágenes y las condiciones puede que no sean las mejores”, argumenta Mario.
Otro dato que destaca Mario Box es el posicionamiento de ambas hermandades: “Tanto el Sepulcro como la Esperanza se han posicionado dentro del recorrido histórico de la Semana Santa, eso beneficiará a reavivar el casco antiguo”. Además añade que “creo que esta acción arrastrará al resto de hermandades a hacer lo mismo, pues hay otras que ya han presentado su interés”.
