Las Amas de Casa, «Dña. Pili» y el reverendo D. Juan Pérez Berná protagonistas del pleno
Ayer se celebró el último pleno ordinario de la legislatura con varios nombramientos
Ayer se celebró el último pleno ordinario de la legislatura, en el que se presentaron 16 puntos de distintas áreas siendo tres los protagonistas del orden del día.
La Asociación Amas de Casa de Albatera fue la responsable de uno de estos tres puntos, pues ayer se llevó a pleno su nombramiento como Dama de Santiago 2023, los motivos expuestos fueron muy sencillos, pues todos coincidían en la gran labor que desarrolla día a día esta asociación, las innumerables actividades que organizan y cómo visibilizan a su pueblo, sus costumbres, su gastronomía, y por supuesto, a sus mujeres: «Este nombramiento es en representación de todas las mujeres de Albatera, de vuestra fuerza y trabajo. Sois la asociación más activa que hay en el municipio, tanto promocionando nuestros pueblo y gastronomía, como por todas las charlas que organizáis. Representáis a la mujer actual. Creo que todo el pueblo se va a alegrar muchísimo de este nombramiento”, declaró Ana Serna, alcaldesa del municipio.
Su fundación fue en 1985, además, cabe destacar el gran incremento que en los último 5 años ha tenido la asociación, pasando de unas 450 socias a las 735 que dispone en la actualidad. La Asociación de Amas de Casa de Albatera, es una de las más numerosas de la provincia de Alicante y de las que tiene una Junta Directiva más joven.
La Asociación ha participado en grandes eventos de promoción del pueblo, como en el corte simbólico del inicio de la campaña de la Granada Mollar, en Alicante Gastronómica con nuestros platos típicos, en esta última edición, por ejemplo, con el tradicional caldo colorao y el plato ligero. Además, también organizan diversas charlas que visibilizan a la mujer en días importantes, como el 8M. Y por supuesto, la función de apoyo que supone para muchas mujeres del municipio. Mari Elvira Rufías, presidenta de la Asociación, agradeció el nombramiento y el apoyo que reciben desde el Ayuntamiento.
En la misma línea de acuerdo y en forma de agradecimiento, se presentó la propuesta de denominar a la Escuela Infantil Municipal el nombre de una de las profesoras más longevas del municipio, pasando a denominarse Escuela Infantil Municipal “Dña. Pili”.
Mª del Pilar Balmaseda nació en Albatera en el año 1938, estudió magisterio y ejerció en diferentes municipios de España, desde una pedanía en Águilas, en Granja de Rocamora y posteriormente, la mayor parte de su vida profesional, en Albatera.
Maestra exigente, severa en algunos momentos pero cariñosa y entregada a su profesión. Sus alumnas la llamaban Doña Pili; las aulas de las que se hacía cargo superaban las 40 alumnas. Premiaba a sus alumnas que hacían las cosas bien, recompensándolas con pequeños detalles y regalos para motivarlas.
En una época donde no muchas mujeres conducían, ella ya lo hacía, realizando largos viajes en aquellas carreteras de las décadas 60, 70 y posteriores. Recogía a niños, vecinos del pueblo y los subía al cole en su coche, asegurándose que llegaran a tiempo y puntuales.
En definitiva, maestra excepcional, mujer que dedicó su vida a la enseñanza, que no quiso jubilarse a mitad de curso y esperó a que este finalizara para acompañar a las que ese año eran sus alumnas. Persona generosa y de carácter, que demostró siempre con su familia y sus sobrinos, también con alumnos y vecinos del pueblo, pero su nombre, Doña Pili está y estará en la memoria de esos “pequeños, locos bajitos” que ella ayudó a formar durante todos esos años de maestra, así lo han expuesto en la propuesta presentada y que todos han aprobado con creces.
“Tu nombre va a estar toda la vida ahí, Doña Pili. Este reconocimiento es una forma de reconocer a todos esos profesores que se encargaron de ayudarnos a que, cuando seamos mayores, intentáramos cambiar el mundo”, declaró Ana Serna.
Por último, también como forma de reconocimiento, se propuso el nombramiento de la calle de la entrada principal del nuevo CEIP Cervantes, entre el camino viejo de Orihuela y el camino de la Acequia de Cox, como Reverendo D. Juan Pérez Berná, por los siguientes motivos expuestos:
Don Juan Pérez Berná (1937-2022) nació y falleció en Albatera, fue el tercer hijo de Juan Pérez Bernabeu y Trinidad Berná Serna, (Juan de la Tejera y Trinidad del Pito) y hermano de Trinidad, Carmen y Pedro. Don Juan, como tantos niños de la posguerra traspasó los umbrales del Seminario de Orihuela por iniciativa de sus padres, quienes consideraron la carrera clerical un futuro digno acorde con la inteligencia que tempranamente ya manifestaba.
Don Juan fue ordenado sacerdote con casi 23 años el 24 de septiembre de 1960 y cantó misa en la parroquia de Santiago Apóstol de Albatera el 1 de octubre de 1960.
Se incorporó como superior al recién creado Colegio Diocesano de Santo Domingo de Orihuela. En Santo Domingo desempeño su labor con alegría y buen humor, rasgo por el que es recordado entre sus compañeros y que contrastaba con su fuerte carácter. Cuando tuvo la edad requerida se le asignó Parroquia, iniciando una andadura sacerdotal que afrontó siempre con ilusión. Don Juan fue destinado a parroquias donde sus predecesores habían planteado dificultades y que él debía encauzar; esta situación reiterada le provocó serios problemas de salud y sus superiores decidieron concederle un destino cercano a su familia. En San Isidro de Albatera se repuso para continuar su ministerio en Algorfa, Benijófar y finalmente en Rojales.
Don Juan al jubilarse se estableció en Albatera donde hasta meses antes de su fallecimiento fue capellán de la ermita de San Pedro Arrepentido, sede de la Hermandad que décadas atrás habían fundado su padre y sus tíos. Este ministerio marcó profundamente su relación con el pueblo de Albatera. Tanto en la ermita como en su propia casa siempre acogió y consoló las inquietudes de muchas personas que se acercaban a él solicitando consuelo espiritual y económico.
Pero Don Juan también era hombre, amigo de conversaciones en bares y de comentarios deportivos. Fue ejemplo de deportividad llevando con alegría y humor las disputas entre clubes aunque para el suyo siempre tuvo la preferencia. Don Juan Pérez Berná es un albaterense de corazón a recordar por su altura intelectual, entrega ministerial y profunda y sincera humanidad.
«Una palabra que define a Don Juan es entrega, a todos. Este reconocimiento está más que justificado. Todo el mundo quería a Don Juan, esta es una forma muy bonita de reconocer el amor que tenía por su pueblo. Enhorabuena a la familia. Todos hemos estamos de acuerdo en esta decisión. Esta es la manera que tenemos de devolverte todo lo que tú hiciste por nosotros», así lo expresó Ana Serna.
