La Junta Local de la Asociación Española Contra El Cáncer en Albatera dice adiós
Tras cuatro años la asociación anuncia su marcha
La Junta Local de la AECC en Albatera lanza un comunicado a todos los vecinos del municipio para comunicar su despedida:
«Hace 4 años nos encomendamos la misión de ayudar, en la medida de nuestras posibilidades, a quienes padecen algún tipo de cáncer y a quienes trabajan para conseguir vencerle. Somos conscientes de cómo se vive el momento inicial, sabemos cómo los tratamientos pueden afectar a las personas diagnosticadas, hemos vivido la pérdida de algún ser querido y por ello sabíamos que no sería fácil.
Desde Alicante nos dieron el visto bueno para comenzar y eso nos alegró. Iniciábamos un camino ilusionados, como un niño comienza su curso escolar. Nuestra meta no tenía números, ni cantidades económicas, ni fotografías, ni vídeos. Nuestra meta era un café con una persona, una conversación tranquila, una sonrisa, ayudar a una familia, llevar ánimo, autoestima, pequeñas herramientas sanitarias…
Pero el pueblo de Albatera no quiso que sólo fuera así. El pueblo de Albatera se vistió de rosa y salió a la calle para decir bien alto que nadie está sólo en esta lucha, qué todos, siendo diferentes, somos uno, somos el lazo de la solidaridad. Acabábamos de empezar y Albatera era uno de los pueblos que más había aportado a la AECC de la provincia de Alicante.
No dejamos de tomar café e infusiones, nos llamaban del Ayuntamiento porque no nos daba tiempo a recoger todos los tapones que la gente depositaba en el lazo solidario del Parque Unión Musical la Aurora. La puerta de nuestra sede estaba abierta y en su interior escuchamos los gestos de solidaridad más bonitos que hemos vivido, las historias que no se escriben, las historias que se viven.
Hubo mágia, de la de verdad, y muchas actividades emprendidas de forma altruista por vecinos que aportaban su tiempo y trabajo. Fuimos al teatro, nos cortamos el pelo, comimos pizza, nos perdonamos, relajamos, escuchamos música…. Y siempre estabas tú. Gracias. Gracias a todas las personas que han colaborado haciéndose socios, quienes nos han puesto las cosas tan fáciles. Gracias a nuestro equipo de voluntarias. Enormes, trabajadoras, luchadoras…
Ahora ha llegado el momento de despedirnos. Nuestro equipo está incompleto. Nuestras vidas han cambiado. Hemos puesto a disposición de la AECC de Alicante nuestros cargos y esperamos que alguien pueda retomar este gran proyecto.
Nos llevamos dentro todo el cariño recibido, las sonrisas de quienes ya no están, las cosas aprendidas y las desaprendidas. Nos llevamos un trocito de vosotros que nos recordará siempre lo agradecidos que os estamos».
