Hablar de terremotos en la Vega Baja, es sinónimo de alta probabilidad de sufrir daños en edificaciones
Hemos hablado con Mario Berná, arquitecto de Box Arquitectura & Urbanismo sobre las consecuencias de los terremotos en las infraestructuras y sobre todo en las edificaciones
Box nos explica que «hablar de terremotos en la Vega Baja, es sinónimo de alta probabilidad de sufrir daños en edificaciones». Para muestra son las reconstrucciones íntegras de poblaciones como Almoradí o Benejuzar en el siglo pasado, por devastadores movimientos sísmicos.
Y todo ello es debido a que la Vega baja, junto a la región de Murcia y la andaluza hasta tierras Granadinas se encuentran en la zona sísmica de mayor potencial sísmico de territorio nacional.
Hoy, lunes, 13 de agosto de 2018, Albatera ha vivido de primera mano uno de los terremotos de mayor intensidad de los últimos 60 años de la Comarca.
Por suerte, debido a su corta duración entonó a 10 segundos, no ha ocasionado daños considerables y visibles en edificaciones, independiente de su antigüedad.
Si bien, su intensidad V (4,3) es origen probable de pequeñas fisuras de tabiquerías y cerramientos, en concreto aquellos elementos que ya se encontraban con una cierta inestabilidad previa.
En la actualidad las normativas de construcción y sismoresistentes españolas, son muy rigurosas, y en constante revisión y actualización por parte del Ministerio de Fomento con la finalidad de marcar unos hitos mínimos que garanticen unas construcciones de amplias prestaciones frente a movimientos sísmicos.
Debido a la intensidad del seísmo, se aconseja que los propietarios de edificaciones realicen una inspección ocular de sus viviendas y construcciones, con la finalidad de descartar daños más allá de los superficiales o estéticos
Y toda aquella construcción que supere los 50 años, deberían realizar los IEE que establece la legislación nacional, para garantizar la estabilidad estructural de las edificaciones.
Información facilitada por Mario Berná Box de Box Arquitectura & Urbanismo
