Así es la imagen restaurada de la Virgen de la Candelaria

Ayer, sábado 2 de abril, se llevaba a cabo la presentación de la restauración de la Virgen de la Candelaria realizada por Blanca Spreafico López en Murcia, conocida por su gran trayectoria de restauradora desde 1997.

La imagen de la Virgen es depositada en la parroquia de la localidad y es una de las obras de mayor valor del lugar, pues se trata de una pieza de José María Ponsoda del año 1941 encargada por Carmen Limorte Alarcón. Dado su lamentable estado, los Auroros de Albatera, en colaboración con la Hermandad de la Virgen del Rosario y de la Aurora y la la Cofradía del Santo Sepulcro, decidió solicitar una subvención a la Diputación de Alicante para hacerse, en parte, cargo de los gastos.

El proceso de restauración comenzó en agosto, y tal como asegura Blanca, el mayor problema que tenía la imagen era la suciedad (polvo incrustado) y la policromía: «El velo que debía semejarse a un encaje estaba muy mal, ya que había desaparecido casi todo por la limpieza que se le realizaba a la imagen, la mano que sujetaba la candela le faltaban cuatro dedos, por ello se debe llevar mucho cuidado con manipular la imagen con la sujeción de la vela en las manos. Además había mucha suciedad, cera, grasa y muchísimos repintes de distinto color y naturaleza. El brazo del niño y su policromía también estaban dañados por la humedad. Había decenas de grietas en el vestido… Se cogió con un deterioro muy importante».

Para arreglar todos estos deterioros Blanca realizó varias fases en la restauración: «Primero hay que consolidar la pieza mediante la inyección de una tipo de resina. Seguimos con la fase de limpieza, las más compleja y larga porque lo que hagas es irreversible, trabajando sobre los distintos tipos de suciedad y policromía, además siempre lo hago en gel, ya que la técnica es mucho más controlada».

La restauradora asegura que también había varios repintes, que las caras es lo que más limpio estaba y que uno de los problemas es que esta escultura no tenía nada de barniz. «Posteriormente seguí con el procesos de reposición de dedos con resina epoxi. Y luego con el velo, una parte muy complicada. Y por último se emplea la fase de estucado y de reintegración cromática de la obra».

El acto finalizo con unas palabras de agradecimiento por parte de Joaquín Pérez, en representación de la Hermandad de la Virgen del Rosario y de la Aurora y de Miguel Juan, presidente de la Cofradía Santo Sepulcro de Albatera a todos los involucrados en el trabajo, especialmente a Blanca Spreafico, a la corporación municipal de Albatera, en especial a la alcaldesa Ana Serna y a la concejala de Cultura, Mari Carmen Ferrández y a la Diputación de Alicante por la subvención.