Antiguamente, una de las costumbres de las mujeres de Albatera era plantar sus propias flores para el Día de Todos Los Santos, y con ellas decorar las lápidas de sus familiares. Todavía quedan mujeres que lo siguen haciendo y embellecen a sus familiares con plantación propia, se trata de los crisantemos, normalmente de color amarillo. Muchas de esas mujeres aseguran que «los crisantemos de toda la vida» ya no los venden, sino que hay que plantarlos, tal y como lo hacían también sus madres.
Tras una visita por el Cementerio Municipal de Albatera, una de esas mujeres que aún planta sus propias flores, nos cuenta que su madre «siempre cultivaba sus crisantemos para el día de Todos Los Santos, al ser la única flor que dura unos 15 días y que solo está para estas fechas tan especiales».
La mujer que aún sigue esta tradición nos ha contado cómo lo hace: «Esta variedad se debe plantar en enero, y florece en octubre. Necesita bastante agua para que la tierra esté siempre húmeda». Ahora, en su floración, necesita una gran exposición a la luz solar, siendo una planta muy resistente, de ahí que también sea tan útil para decorar en exterior.
Hay tres tipos de crisantemos: de cuchara, pompón o araña, siendo los típicos que podemos ver en el cementerio los de cuchara. En el lenguaje floral, el crisantemo significa alegría, perfección y eternidad, aunque en España su significado está asociado con respeto y memoria al ser la flor más utilizada para el Día de Todos los Santos.
Plantar tus propios crisantemos era una costumbre muy arraigada en el municipio en tiempos pasados, ahora las flores, normalmente se compran, aunque todavía quedan mujeres como ella, que continúan con la tradición.